«Es muy probable que el cambio en el ciclo político genere una recuperación de las expectativas»

El director de Denk Consultores afirmó que mal resultado para el Gobierno «es un reflejo de la ausencia de cualquier política destinada al crecimiento». En política monetaria, espera que antes de fines del primer semestre de 2017 la tasa se ubique en 3%.

Carlos Alonso

Economía, Pulso

Lo más probable es que el crecimiento de la economía durante los cuatro años de esta administración termine en torno a 2%. Esta magra cifra, según la visión del economista y director de Denk Consultores -además de ex asesor de Hacienda durante la administración Piñera-, Pablo Correa, fue una de las causas que explican la derrota en la elección municipal, donde junto con perder comunas emblemáticas como Santiago y Providencia, cedió en la totalidad de municipios gobernados.

¿Cuál es la primera lectura económica de los resultados de las municipales? ¿Se puede entender que hay un rechazo a las reformas que ha impulsado la actual administración?

Sin lugar a dudas, la lectura demuestra un fracaso enorme para el proyecto político de la Nueva Mayoría, que en materia económica se ha manifestado en un ciclo de crecimiento mediocre, con efectos en el día a día de gran parte de las familias, su nivel de consumo, estabilidad laboral. Además, es un reflejo de la ausencia de cualquier política destinada al crecimiento.

Con este resultado algunos analistas afirman que se puede esperar que las expectativas vayan mejorando, considerando que el pre candidato mejor posicionado será de centro derecha, ¿comparte esa visión?

Es muy probable que el cambio en el ciclo político genere una recuperación de las expectativas, en forma gradual pero creciente, hasta marzo de 2018. La tendencia debería ser bastante independiente de los resultados esperados, no así la magnitud. Cuando analizamos las series históricas, efectivamente se da este fenómeno, que en el caso de que se posicione un escenario en el que la centro derecha vuelva al poder, se vería potenciado.

¿Ve que ante este escenario electoral adverso aparezcan demandas de los parlamentarios por más gasto público?

En materia de gasto público, es importante que la discusión en el Congreso no se torne en una batalla por incrementar el gasto o modificar su composición para aumentar las transferencias directas durante 2017, como una forma de favorecer al oficialismo en las elecciones de ese año.

¿Cuál debería ser el rol de Hacienda?

El rol de Hacienda en ordenar esta discusión será muy relevante, porque habrán presiones tal como en 2009, sobre todo en la composición del gasto, que se fuercen programas de mala calidad que dejen comprometido gasto de cara a 2018, que se claudiquen ciertas batallas como el reajuste del sector público.

Ayer rondó el rumor de cambios en el comité político, ¿cuál sería la señal si se vuelve a cambiar al ministro de Hacienda? ¿Lo ve factible?

Una salida de Rodrigo Valdés de Hacienda sería una muy mala señal. Respecto a un posible cambio de gabinete, mezclar las fallas del comité político con la conducción económica sería mezclar peras con manzanas, y una eventual salida de Valdés de Hacienda creo generaría más problemas que soluciones para la conducción del gobierno.

¿Hay espacio para que este Gobierno cambie algunas políticas económicas para dar más y mejores señales pro crecimiento?

Veo muy poco probable que el Gobierno decida abordar una agenda agresiva de reformas económicas, sino que debería más bien facilitar una recuperación de las expectativas que le sea funcional de cara a las elecciones de 2017. En ese sentido, es más probable que se vea una agenda más micro y de cierre de agendas que aún están pendientes en muchos ministerios sectoriales, cosa que perfectamente se podría empaquetar como una agenda pro crecimiento, pese a que no sea más que una cosa cosmética.

¿Para cuándo el país podría volver a creer a tasas sobre el 3%?

No hay ninguna razón para pensar que Chile no pueda volver a crecer nuevamente a 4% o 5%. Sería sumamente decepcionante si nos conformáramos con menos. En el corto y mediano plazo será difícil porque efectivamente habrán pasado cuatro años con una inversión sumamente baja, por lo tanto, para pensar en un ciclo con tasas más alta debe retornar primero la inversión.

Y para que vuelva la inversión ¿se debe modificar la Reforma Tributaria?

A este Gobierno le será difícil retomar las confianzas y en ese sentido, el año 2017 está bastante jugado. Dependerá de las señales que veamos desde 2018 en adelante, y esas son señales políticas. Con respecto a cambios a la Reforma Tributaria, lo que se necesita es volver a un sistema integrado y también ver algún mecanismo que cumpla el rol que tenía el FUT para incentivar la inversión.  Por ello, una modificación impositiva deberá ser una tarea prioritaria en los primeros meses de la nueva administración.

POLÍTICA MONETARIA
Tras el bajo IPC de 0,2% de septiembre, ¿espera en el corto plazo un cambio de sesgo a expansivo y una reducción de la tasa de interés?

El Banco Central tiene una variable muy abierta y que es lo que finalmente termine haciendo la Reserva Federal (Fed), por ello adelantarse a lo pudiera pasar en Estados Unidos no tiene sentido, porque puede volver a sorprenderse. En el ámbito interno, el próximo cambio de presidente del ente rector recomienda al BC ser prudente y mantener la tasa y el sesgo para dejar con las opciones abiertas y no atado a un cambio de la dirección de la política monetaria al próximo titular del BC.

¿Pero de todas maneras espera que el próximo movimiento de la tasa de interés sea a la baja?

Se justifican bajas de la tasa de interés, pero no por el dato de septiembre, sino que por los cambios estructurales que está teniendo la economía con un crecimiento tendencial para los próximos cinco años más cercano a 2,5%, y con ese crecimiento la tasa de interés neutral será más baja. Lo más probable es que antes de fines del primer semestre veremos una tasa de interés de 3%.

Economía – Pulso.cl
Autor: Carlos Alonso
OCT 25, 2016
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